Volvemos a Romainmotier (donde habíamos estado con Héctor un frío día de abril del año pasado), no para visitar la famosa abadía de estilo románico, sino para pasear con los niños en compañía de Regis, Jelena & Cía.
El tiempo esta vez mucho más propicio para nuestros propósitos.
Bello el arranque de la ruta..
Y bellas eran ellas..
Los niños ya están hechos unos jabatos, buena pandi
Entramos en una reserva natural de vegetación exuberante!
Hubo que hacer una paradita para que las huestes recuperasen fuerzas..
La vuelta aguas arriba del Nozon
Hasta alcanzar la famosa "Cascada du Dard"
Un agradable paseo con final en Ferreyres donde los chicos aun echarán un partidito con los locales :-)
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